La tarjeta cuenta con un dibujo de un pollo (parte superior izquierda) y a la mano derecha el viejo truco de insertar la imagen de los artistas que supuestamente “estarán presentes”. Esto nace en la época de la technocumbia, hace unos años cuando diversos grupos amenizaban de verdad actividades privilegiadas. Con el paso del tiempo, el viejo truco quedó como un recurso gráfico más en el diseño y solo hace referencia, en algunos casos, al tipo de música para amenizar. Lo que se debe destacar es que las curiosas tarjetas ya forman parte de nuestra cultura gráfica; es decir, se ha institucionalizado.
Para mostrar de una manera más clara cómo es que estaría organizada una tarjeta que hace referencia a una pollada u otra actividad parecida, se procederá a describirla. En primer lugar, la tarjeta tendría el título del evento aludido. Este título podría tener el nombre de “Pollada Bailable”, “Parrillada Bailable” o “Anticuchada Bailable”. En segundo lugar, se pone la fecha, hora y lugar en los cuales se realizaría dicho evento. Después, se darán detalles precisos con los que contaría dicho acontecimiento. Por ejemplo, que se localizará un potente equipo estereofónico o que el bar estará surtido de deliciosa cerveza, entre otros. Luego, se colocaría el precio de la colaboración. Este precio bordaría los 5 o 7 nuevos soles como suele suceder en la gran mayoría de “polladas”. Finalmente, no habría que olvidar la numeración con la que contaría dicha tarjeta y un pequeño aviso que informe si es que fue esta tarjeta pagada o no.
Para mostrar de una manera más clara cómo es que estaría organizada una tarjeta que hace referencia a una pollada u otra actividad parecida, se procederá a describirla. En primer lugar, la tarjeta tendría el título del evento aludido. Este título podría tener el nombre de “Pollada Bailable”, “Parrillada Bailable” o “Anticuchada Bailable”. En segundo lugar, se pone la fecha, hora y lugar en los cuales se realizaría dicho evento. Después, se darán detalles precisos con los que contaría dicho acontecimiento. Por ejemplo, que se localizará un potente equipo estereofónico o que el bar estará surtido de deliciosa cerveza, entre otros. Luego, se colocaría el precio de la colaboración. Este precio bordaría los 5 o 7 nuevos soles como suele suceder en la gran mayoría de “polladas”. Finalmente, no habría que olvidar la numeración con la que contaría dicha tarjeta y un pequeño aviso que informe si es que fue esta tarjeta pagada o no.
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